Estación de Corea del Norte. Boceto a tinta partiendo de un audiovisual filmado por Pedro J. Saavedra.
Sampo en España. Relatos de Kalevala: Proceso
Este ha sido el laborioso proceso para llevar a cabo este cómic.
Lo primero y siempre lo más importante es el guión. En esta ocasión había que sintetizar la historia original, escrita en prosa y repleta de alegorías (genial para un libro, mortal para un cómic mudo) Finalmente decido hacer una historieta con final abierto en ocho páginas, dividida en tres actos.
Más tarde hay que dedicar tiempo al diseño de personajes, una de las partes que más me gusta, en esta ocasión fueron varias semanas de trabajo en encontrarlos, pero contaba con bastante tiempo para este proyecto, así que hice muchas versiones a lápiz y en digital. Este que veis abajo es Vainamoinen, el malo del libro, un viejo cantor, que ya nació viejo, también es mala suerte.
Lo que le sigue es plantear la historia, mediante el método habitual. Os enseño el proceso de la página 2.
Boceto, suelo hacerlos bastante pequeños y muy rápido, en cuanto me vienen las ideas para componer las páginas:
Dibujo a lápiz, con bastantes cambios en la maquetación del página, respecto al boceto, me gustan los cambios de última hora en este trabajo, nunca te aburres:
Impresión en azul, escaneo la página a lápiz, con Photoshop convierto el lápiz a color azul, le saco una copia impresa y la entinto, luego la escaneo y le quito los azules que veis abajo con Photoshop, es decir que con este proceso me ahorro borrar el grafito y conservo mi página a lápiz, por si pasa algo.
Entintado, yo uso rotuladores calibrados Unipin, y trabajo a doble línea, se tarda más que entintando a pincel o plumilla, pero a mí me da un control preciso. El azul que veis es el dibujo a lápiz sacado por la impresora, actualmente trabajo con una impresora HP DIN A3+ de inyección de tinta, (el tóner no vale para esto señores). Mis páginas entintadas son A3, dibujas mucho más desahogado y puedes hacer infinitos detalles.
Después de escanear la página a tinta, le quitamos los azules y ya está lista para darle color. A día de hoy (y creo que por mucho tiempo), coloreo digitalmente con Photoshop, mediante capas y recortes de zonas entintadas, que dan más profundidad a la escena.
Para terminar creamos una copia con todas las capas acopladas en una sola, para que cada archivo no tenga 500 megas, (se puede discutir sobre el tema de acoplarlas o no) y finalmente lo llevamos a la imprenta en un CD.
¿Veis qué fácil?